Leo nació el 18 de Agosto, así que el verano del 2010 lo pasé paseando barriga por la Rambla del Poblenou. Me parece que fue en estos momentos inspirados en los que la idea de Mammaproof se fue gestando.
Yo empiezo siempre mi paseo en la intersección de la Rambla con la calle Pallars. En la esquina mar tenemos una preciosa casa color verde de estilo modernista cuyos balcones me dieron siempre mucha envidia. Justo enfrente nuestro querido Mercadona.
Si seguimos bajando llegamos a Pujades (calle del metro Poblenou) tenemos un HappyYoga en un bajo espacioso y abierto a la calle. No sé por qué los locales en donde se practica yoga tienen siempre muy buen ambiente: huele a incienso, la musica es suave, la luz tenue , los colores vivos aunque no agresivos y los materiales naturales. Suelen estar agradablemente pensados con cariño, para que nos sintamos bien. En éste Happy yoga además tenemos servicio de cafetería por las mañanas. Lo lleva una chica super maja que siempre te propone echar más agua en la tetera. Además tiene deliciosos pasteles hechos a manos y zumos naturales. La dueña del happy yoga es una mamá lindísima que adora a los bebés y con quien es agradable intercambiar experiencias en la crianza.
Sigue paseando, recargando las pilas solares y disfrutando del espectáculo de la calle. No te pierdas los pinchos de abuel@s que adornan los bancos en cada rotonda. Son picantes bocados de la tercera edad, intercalados por dulces mamás con sus bebés y saladas cuadrillas de adolescentes.
Llegamos al Tio Ché , cita obligada en verano para una horchata. Yo soy fan del blanco y negro (café helado y leche merengada) y del cubanito (horchata con bola de helado) Si estás dando el pecho, te invitan a la primera horchata de la temporada. Parece ser que ésta bebida mejora la producción de la leche materna. ¿Qué dirá Carlos Gonzalez al respecto? Si alguna asesora de lactancia lee éste post que por favor no se corte en corregir mi ignorancia.
Estamos ya en la rotonda conocida como la del Casino de la Alianza del poblenou. Es un teatro sala de espectáculos que acoge eventos tan dispares como el encuentro internacional de swing ó la última gira de Nick Cave donde también presentó su novela, “The Death of Bunny Munro”. Durante las fiestas de la Merced, también podemos ver en esta plaza, como se montan los Castellers. Tan cerca, que se te saltan las lágrimas de la emoción… la verdad es que yo lo paso fatal cuando la niña trepa hasta lo más alto y la torre humana se tambalea… siempre pienso en lo mal que lo tiene que estar pasando su mamá.
Una cuadra más abajo tenemos la plaza de la Iglesia. Éste es un lugar agradable para comer fuera o tomar algo en el Bar del gaditano. Suele tener pescadito frito al estilo andaluz y unas patatas bravas llenas de pringue que bajo mi punto de vista son… sin comentarios. En la intersección se encuentra El Barlovento. Sirven muy bien las cañas y sus tapas son aceptables. Tienen una terraza arriba con ascensor en la que se está a gusto en verano. porque es exterior aunque cubierta y protegida del sol. En la Calle Doctor Trueta, tenemos el restaurante La Cala Blanca . Me encanta ir a comer una paella “senyoret” (el marisco va todo “pelaito”) en éste restaurante familiar en el que la pareja que lo lleva siempre te atiende con mucho cariño.
En último tramo antes de Paseig de Taulat tenemos una cafetería pequeñita pero muy agradable para pararse para tomar algo. Se trata del Republic Café. Son gente maja y no te ponen mala cara si entras con el cochecito y acaparas medio bar. Hacen bagels deliciosos. Última parada antes del mar, aquí donde se acaba el paseo “señorial”, y enlazamos con una parte un poco desangelada, en la que las casas antiguas de pescadores conviven con los pisos nuevos que claman ser alquilados o vendidos. En la esquina del carrer Taulat se encuentra mi favorito: El Café Blau. Es un café muy agradable y además tiene wifi … ya iba cuando se podía fumar y ahora que está prohibido es una delicia. Además tienen una terraza fuera para los días primaverales. Los croissants están riquísimos y tienen una gran variedad de tés y café, así como pizzas al estilo italiano bastante ricas. Si la tarde se anima os aconsejo probar también sus tentadores GinTonics.
A partir de ahora se inicia la secuencia que nos llevará hasta el…¡3, 2, 1… el mar! ¿Cómo puede ser que en una ciudad como Barcelona podamos entre oler la brisa marina mezclada con el aroma de una pineda mediterránea?
Ahora sólo nos queda sentarnos en uno de los bancos para admirarla ó bien bajar a la playa para hundir los pies en la arena y zambullirnos en el agua. Quizás también nos pueda apetecer tomar una caña en la terraza del club de vela… sábados y domingos ¡Barbacoa!
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Ver Política de Moderación de comentariosSoledad E
Me encanta el paseo virtual, yo siempre bajaba desde Clot a la playa caminando por aquí, y de todas las delicias que recomiendas la única que puedo corroborar por experiencia propia son las horchatas de Tío Ché, en mi modesta opinión las más ricas de Barna. ¡Qué ganas de recorrer la rambla con una buena conocedora como tú! Y además, comer un bagel, que desde hace casi 2 años no pruebo 🙂
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